Cada día, cada jornada laboral ocurre: vivimos presos de una situación donde la vocación se encuentra amordazada. ¿Por quién? Por nadie y por todos. No nos engañemos: la culpa es mía, tuya y nuestra como persona, colectivo y profesión. Es más fácil mirar para otro lado y considerar que esta cuestión concreta no me afecta. Solo es de otra…
Monthly Archives