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¿Cuantos justos necesita la Atención primaria ?

escrito por Marian Jiménez 11 septiembre, 2016
Tras leer el magnífico artículo  de @sminue en su Gerente de Mediado de hoy (http://gerentedemediado.blogspot.com.es/2016/09/no-hay-futuro.html#comment-form)
me ha venido a la cabeza, ignoro por qué camino neuronal insospechado , una cita del libro del Génesis (18:20-22) que siempre me da que pensar cuando la oigo pues parecería que mostrara la injusticia de un Dios al que proclaman clemente.
En este pasaje Abraham le pregunta a Jehová por el futuro de una ciudad, Sodoma- máxima expresión de inmoralidad, siempre en el contexto del génesis – y se interesa por cuántos justos son necesarios para que no deje caer la lluvia de fuego sobre la ciudad acabando con sus moradores. Primero son cincuenta y acaban siendo diez  el numero de personas justas que podrían salvar al resto; claramente no es número sino la calidad lo que determinará la acción de la salvación.
Haciendo un símil rápido y quizá simple me pregunto, ¿cuántos médicos de familia implicados, trabajadores, ejemplares, hacen falta para » salvar la atención primaria «?, ¿qué número determinaría la «masa crítica» de justos y honrados profesionales que impidan que la lluvia de fuego – mala gestión político-sanitaria- acabe con la atención diaria a millones de pacientes?
Su número sigue siendo un misterio pero para contarlos deberemos saber qué requisitos necesitamos. Los justos lo serán si:
– Diferencian en ellos la decepción del hartazgo: el primero se vive de modo activo y el segundo, no.
– Transitan por la profesión sin transmitir el desánimo como aliento.
– No trabajan en función de la remuneración recibida  o de la propiedad de la plaza. 
-Consideran al nuevo, «al sustituto», uno más con sus mismos derechos
– Desterraron de su vocabulario el «saca plaza y échate a dormir»
– Consideran el trabajo diario como una oportunidad de plantear mejoras y realizarlas (sin esperar noticias y aprobación de un «gerente sin corazón»)
-Impregnan de ética cada pequeño detalle  asistencial. No hace falta verse inmerso en grandes dilemas sino saber posicionarse con valentía y decisión.
– Son capaces de cambiar de modo activo el » siempre se ha hecho asi» por un «analicemos los posibles cambios», sin despeinarse.
– Siguen estudiando y formándose porque consideran que les queda mucho que aprender.
-Plantean con fuerza, seriedad y sensatez a la Administración criterios de selección objetivos y transparentes (@sminue dixit) que conduzcan a la elección de los mejores.
-Que sean capaces de evitar la desidia, el cansancio, la rutina y el tedio…
Esta es la línea trazada en la arena que no debemos cruzar; lo dejaremos aquí o nos quedaremos sin «justos». Dicho de otro modo, muy gráfico por cierto, @fraveira hoy sentencia en TW: «Para un cantante de metal no hay nada peor que descubrir que los agudos de hace dos años, por dejadez e inactividad, son ahora imposibles”.
Conclusión: el número de «justos» nos lo dará el número de aquellos dispuestos a luchar en contra de dejadez y la inactividad, manteniendo la ilusión por la profesión y al paciente en el centro.Total…que no encuentro un número claro pero si las características que deben tener. 
Espero que encontremos un número suficiente como para que las gerencias decidan no intervenir.

Nota: De aquí viene la expresión «pagaran justos por pecadores » en una versión libre.
“¿Destruirás también al justo con el impío?” (v. 23). Abraham valientemente presenta un dilema ético. Raras veces existe un lugar tan completamente malo que no incluya ningún justo entre ellos. Si existen personas justas en Sodoma y Gomorra, ¿puede Dios justificar imponerles el mismo castigo a ellos que a los malos? En la guerra esto se llama “daño colateral” y la idea nos repugna. En la guerra, algún daño colateral puede ser inevitable – al fin y al cabo, guerras son peleadas por humanos imperfectos – pero Dios no es imperfecto y ha de llegar a un estándar más alto. Abraham, en su preocupación por Lot y su familia (y otros justos que pueden vivir en estas ciudades) presenta una cuestión ética. Quizá la posibilidad de hacer daño a los inocentes puede hacer que Dios cambie sus planes…. (http://www.lectionary.org/EXEG-Spanish/OT/01-Gen/Gen_18.20-32.htm)
“Quizá hay cincuenta justos dentro de la ciudad: ¿destruirás también y no perdonarás al lugar por cincuenta justos que estén dentro de él?” (v. 24). Aquí, Abraham actúa como abogado defensor. Presenta el dilema ético y lo especifica. Escoge un número – en este caso cincuenta – y le pregunta a Dios si no perdonará las ciudades por el bien de cincuenta justos. Al sacar el tema de los cincuenta justos, dibuja una línea en la arena. ¿Cruzará Dios esa línea y llevará a cabo la injusticia de destruir los cincuenta justos? ¿No perdonará la ciudad por el bien de los cincuenta?
¿Cuantos justos necesita la Atención primaria ? was last modified: noviembre 6th, 2018 by Marian Jiménez
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